El asesor del Secretariado Uruguayo de la Lana, Jorge Bonino Morlán explicó que «la sarna, lamentablemente está muy generalizada en el país oriental». Según su visión, se nota más en el norte del territorio (Salto y Artigas) porque «hay mayor cantidad de ovejas», pero también «hay casos en otras zonas».
La sarna es una enfermedad contagiosa de la piel, provocada por un parásito que no puede verse a simple vista.
Al comienzo la piel se pone roja, luego aparecen ampollas que al romperse y secarse dejan costras. La enfermedad se detecta al ver animales muy molestos que se rascan y se muerden con mucha frecuencia distintas zonas del cuerpo.
Lee también: El Senasa sigue sumando prestaciones online en TAD
Sin embargo, el especialista sostuvo que el ovino continúa siendo un buen negocio, y «los productores deben ser conscientes de la importancia de tener las majadas saneadas por un tema de bienestar animal y por las pérdidas económicas que causan enfermedades como la sarna».
Plan sanitario
Bonino exhortó a los productores ovejeros a que tomen medidas basándose en un plan sanitario: «Hay distintas opciones para tratar la sarna, pero uno de los puntos claves es tomar las medidas concertadas con los vecinos, porque de nada sirve tratar la majada si el vecino tiene el mismo problema y no hace nada para combatir los ectoparásitos» y añadió que «la sarna es una enfermedad muy contagiosa».
El especialista recordó que los tratamientos contra la sarna ovina pueden ir «desde el baño de inmersión, pasando por inyectables y otras opciones, pero es clave tener el asesoramiento de un veterinario para ver cuál es la herramienta mejor a usar, de acuerdo con la situación del predio en particular, según la época fisiológica de las majadas, el personal del establecimiento. El ovino enfrenta además el problema de la escasa mano de obra- y las comodidades del establecimiento (baños, bretes, etc.) para poder atacarla a fondo».
FUENTE: REVISTA CHACRA